“No me arrepiento de haber subido al ring una última vez. Hacer que mis hijos me vean enfrentarme cara a cara y terminar 8 rondas con un luchador talentoso la mitad de mi edad, frente a un estadio lleno de los Dallas Cowboys, es una experiencia que ningún hombre tiene derecho a pedir. Gracias. Esta es una de esas situaciones en las que perdiste pero aún así ganaste. Estoy agradecido por anoche”